Haiku nº 8 Turner, el hijo del peluquero

TURNER EL HIJO DEL PELUQUERO, DEL COVENT GARDEN Y DE LAS BRUMAS DEL TÁMESIS.

                        El hijo del peluquero
                       dibujando entre las brumas del Támesis
Turner


o en las playas de Margate,
viajero infatigable ,
creador de atmósferas de azufre y atardeceres de color púrpura,
precursor del impresionismo y del arte abstracto del siglo veinte.

F. Cienfuegos

Nacido en 1775, cuando Haydn componía sus sinfonías y cuartetos, hijo de un fabricante de pelucas, heredero de Tiziano, Rembrandt y de Poussin, trabajador incansable y, como buen británico, enamorado del mar. Recorrió todos los acantilados y playas de Gales, Inglaterra y Escocia, acompañado por sus cuadernos de apuntes, dibujando acuarelas maravillosas que aún nadie ha podido superar. Pintó con el agua hasta las rodillas los más bellos atardeceres de las costas de Margate,los canales de Venecia y las montañas de Gales. Recorrió los Alpes suizos en busca de la belleza sublime de las tormentas de nieve y de las grandes cumbres. Descendió hasta Venecia para pintar atardeceres imposibles de púrpura y azufre. Encontró en los canales y el conjunto de palacios venecianos los tan ansiados efectos de luz, penumbras violetas y atardeceres anaranjados. Desde San marcos al Arsenal, pasando por San Giorgio, La Cá De Oro, La Giudecca, alentado por su amigo Jhon Ruskin, expresó como nadie, a través de la acuarela, toda la belleza y el misterio de los palacios de Venecia, con sus piedras doradas reflejándose en la tinta verde de los canales.

F. Cienfuegos

Thomas Mann escribió en Muerte en Venecia: "El aire estaba en calma y repleto de olores, el sol lanzaba sus rayos ardientes a través de la bruma que daba al cielo un color pizarra”.

Los textos de André Suares, George Sand, Al fredo de Musset dialogan con las acuarelas de Turner,para expresar las impresiones de los viajeros románticos. André Suares:"La hora del atardecer es la hora de la púrpura. El Lido se sepulta en la laguna violeta. Uno a uno los fuegos de la Giudecca se encienden en la noche."


Poco a poco los colores se oscurecieron, los contornos se volvieron más macizos, las profundidades más misteriosas. Venecia tomó el aspecto de una flota inmensa, después de un bosque de altos cipreses, donde los canales se adentraban como grandes caminos de arena plateada.” De George Sand en sus Cartas de un viajero.


Estos colores, además de su delicadeza, encierran toda una historia, por la manera en la que están situados en cada fragmento de mármol, nos dicen por qué medios se produjo ese mármol y por qué transformaciones ha pasado.” Jhon Ruskin, El lenguaje de las piedras.

F. Cienfuegos

Turner fue un infatigable trabajador que experimentó con las acuarelas y con el óleo para descubrirnos la grandeza de las brumas, las tormentas y las tempestades de nieve. Pintó el incendio del Parlamento de Londres, los naufragios de barcos y los veleros al atardecer en las costas de Gales. Describió con sus efectos pictóricos lo sublime y terrible de la lucha de la naturaleza contra el hombre, la grandeza del mar, sus tormentas y sus atardeceres tenebrosos. Reconocido en Inglaterra como el pintor más grandioso, pintó más de cincuenta acuarelas por el río Rhin. A los 44 años, en 1819, visitó Italia,conociendo Roma, Florencia, Nápoles y Venecia, donde amplió su visión cromática con nuevos tonos violetas, anaranjados, amarillos y azules y donde pintó mas de 1500 acuarelas .
Persona huraña, solitaria y poco habladora, influyó decisivamente en el arte moderno, especialmente en Monet, Pollock y Rothko.

F. Cienfuegos

Pintura al aire libre

Hoy, con motivo de los premios del ejército 2011 se podía ver esta estampa en los jardines del Cuartel General en Cibeles:





Qué hace esto aquí?

Siempre es una buena ocasión acercarse a la Fundación Lázaro Galdiano (http://www.flg.es/), aunque sólo sea por dar un paseo por su jardín. Este domingo iba yo con esta idea, cuando me sorprendió una nueva exposición incorporada a la colección “clásica” de la Fundación, con el sugerente título “¿Qué hace esto aquí?”. Se trata de una muestra de arte contemporáneo de la Fundación María José Jove integrada en las salas del museo, que albergaba hasta el momento exclusivamente arte desde el siglo XI hasta los inicios del XX.

Y el contraste entre lo moderno y el resto de piezas del museo es espectacular y realmente lleva a la pregunta de “¿qué hace esto aquí?” y ayuda a observar con una mirada renovada obras de autores como Barceló, Miró o Saura que, quizás, en otro contexto no hubiesen llamado tanto la atención.

De entre todas las obras de la muestra me quedo con el “Pigmalión” de Francisco Leiro, por el tema que representa (Pigmalión abrazando y besando a su estatua, Galatea, que ha cobrado vida), como por el volumen y presencia de la escultura.


F. Leiro. Pigmalión (1998) Madera policromada 216 x 145 x 115 cm

C.Cienfuegos

Kandinsky al contemplar una obra de Monet

Nunca me canso de leer estas líneas de W. Kandinsky:  

"Yo conocía tan sólo la pintura realista, y de repente, por primera vez, vi un cuadro. No comprendí de qué se trataba hasta que lo leí en el catálogo. El no haber reconocido el asunto me resultó penoso. Me parecía que un pintor no tenía derecho a pintar de un modo tan poco claro. Sentí, confusamente, que a aquel cuadro le faltaba el objeto, y observé, con estupor y turbación al mismo tiempo, no sólo que la sugestión de la obra era grande, sino que, además, la huella que dejaba en la memoria era indeleble y que cada detalle, hasta el más pequeño, permanecía de modo extraño fijo ante mis ojos; pero todo esto era poco claro para mí: no lograba extraer sus sencillas consecuencias. El único hecho que se me presentaba patente era la intensidad de la paleta; una intensidad que nunca había sospechado... La pintura adquiría una fuera y un esplendor fabulosos, y, sin que me diese cuenta, hasta el objeto, entendido como elemento insustituible del cuadro, quedaba minimizado."

Fernando Cienfuegos