Haiku nº 6

¿De dónde viene
Esa manía de nuestros alcaldes
Por derribar nuestra historia palaciega?

Desde hace meses, cada vez que cojo la línea 7 de autobuses, al pasar por delante de Nuevos Ministerios, veo con horror el solar que ha quedado en el número 94 de la Castellana. Y no me acostumbro, no...porque cada vez que paso, de manera inconsciente, mi mirada busca ese palacete que anteriormente tanto me agradaba… y siempre me sorprendo de nuevo ante la imagen de destrucción y desolación que ha dejado su derribo. Sigo sin entender cómo es posible que se haya arrancado uno de los últimos palacetes de la Castellana. Y yo me pregunto, ¿pero no hay una ley, ordenanza o norma de cualquier tipo que prohíba a gobernantes sin escrúpulos ni gusto la destrucción de nuestro patrimonio histórico?

Era uno de los elegantes palacetes que flanqueaban la Castellana hace años y que fueron sustituyéndose, desconozco con qué criterio, poco a poco por edificios modernos, más o menos mediocres, algunos hasta bellos, pero nunca lo suficiente como para poder devolver la excelencia y el aire aristocrático que tenía esta calle madrileña y que, por no ser por los derribos, podría competir hoy en día con otras grandes vías europeas.

Y lo más triste es que en Madrid no fue ninguna guerra la causante de tanta destrucción. De ahí el de valor este palacete, que todavía se mantenía en pie a pesar de las especulaciones urbanísticas que tanto han marcado el desarrollo de nuestra ciudad.  

Más información sobre el edificio en este post:

C. Cienfuegos

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